El descubrimiento del agua
La Naturaleza como maestra
Johann Grander investigó más y reconoció que la energía, incluso en el agua, podía transformarse. Pero había más: el agua desarrolló propiedades especiales. Grander comenzó a observar el agua más de cerca y la puso una y otra vez en contacto con los generadores de imanes.
En sus experimentos, Johann Grander siempre podía confiar en sus cosas:
- sobre la capacidad de observar exactamente la naturaleza ,
- sobre su intuición y
- por instinto de su gata doméstica
Su gata solo quería beber el agua que había sido tratada por Johann Grander, una indicación inequívoca de la calidad del agua revitalizada.
Grander se dio cuenta de que se había creado algo especial a partir de la combinación del agua y sus generadores. Le quedó claro que las propiedades que transmitía al agua también habían sido transferidas a otras aguas sin contacto directo.
Por lo tanto, descubrió el principio básico de la revitalización del agua GRANDER: la transferencia de información.
